Primeramente, Donald Trump anunció en 2019 que los estadounidenses volverían al satélite en 2024 con una misión en la que viajaría a la Luna la primera mujer. Aunque la NASA maneja oficialmente esa fecha, nadie cree que sea posible, dado que ni siquiera existe el cohete capaz de lanzar la misión, El calendario más creíble apunta al regreso al satélite a finales de la próxima década, para saltar a Marte a finales de los 30.
SOFIA (de Observatorio Estratosférico para la Astronomía Infrarroja) Explora el Sistema Solar desde una altura de entre de 38.000 y 45.000 pies, por encima del vapor de agua de la troposfera, que dificulta desde la superficie las observaciones en el infrarrojo.
¿Cuánta agua han encontrado? Entre 100 y 412 partes por millón, el equivalente a una lata de refresco por metro cúbico de suelo esparcido por la superficie. En comparación, indica la NASA, el desierto del Sáhara tiene cien veces más agua.
Antes de las observaciones de SOFIA, sabíamos que había algún tipo de hidratación. Pero no sabíamos cuánta de esa hidratación era en realidad moléculas de agua como la que bebemos todos los días o algo más parecido a un limpiador de desagües»
«Sin la protección de una densa atmósfera, el agua en la zona de la superficie lunar iluminada por el Sol debería perderse en el espacio. Sin embargo, de alguna manera la estamos viendo»
El hallazgo se publica en la revista 'Nature Astronomy', donde otro grupo de investigadores calcula que, además, habría unos 40.000 kilómetros cuadrados del satélite donde no llega nunca la luz del Sol que podrían contener hielo de agua. Son las llamadas 'trampas frías', sitios que el Sol no ha iluminado en miles de millones de años.
El agua es un elemento indispensable para la colonización de otros mundos. No solo para beber, sino también para obtener de ella el hidrógeno que sirva de combustible de las naves y el oxígeno que respiren los seres humanos. La NASA todavía ignora si esa agua lunar será fácil de sacar del suelo.
FUENTE:HOY